Parte 110

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Téo la besó en la boca y se abrazarón...

En otro lugar, Lupita estaba sentada en las piernas de Santos que la acariciaba y besaba...

-¡Lupita...ahora sé porque te amo!...¡Tú me enseñaste que debemos darlo todo por los que amamos, como tú lo das por tú hermanita y por cada una de tús amigas o hermanas! ¡Ojalá Dios me dé las fuerzas de amar como tú amas mí vida!

-¡Te amo Santos, eres el mejor hombre que Dios pudo darme!

En otra parte de la casa Tómas hablaba por celular...

-¡Te Amo cachorrita! ¡Cada minuto lejos de tí ha sido un martirio!...Sólo quería que lo supieras y que pase lo que pase siempre te voy a querer...¡Sí, espero verte pronto!...¡Adios Jennifer!

Tómas colgó con cara de tristeza, y vio que Giovanni estaba allí con una sonrisa...

-¡Entonces amas a Jennifer! ¡No te preocupes, ya me lo imaginaba! ¡Y no me voy a burlar...ojalá yo tuviera tú suerte amigo!

-¡Pero creo que en algo sí estamos en la misma situación!...¿¡No!?

Giovanni hizo señas afirmativas con la cabeza...

Roberta abrazaba al dormido Diego, sintiendo como sí una nube de tristeza descendía sobre el rancho; sin saber porque, tal vez por las palabras de Diego, se sentía muy preocupada. No sabía que otras personas percibían lo mismo que ella...

El día siguiente parecía un día lleno de esperanzas; al menos eso pensaban las chicas...

Agarraditos de la mano, James y Vico comunicaron al resto del grupo que ya eran novios...

-¡FELICITACIONES VICO! (exclamó Mía supercontenta, mientras abrazaba y besaba a su amiga del alma)

-¡QUE CHÍDO! ¡Yo sabía que tenía que pasar! (dijo Roberta abrazando a Vico y a Mía al mismo tiempo)

-¡GRACIAS A DIOS! ¡Soy tan féliz por tí Vico! (dijo Lupita emocionada)

-Pos...¿¡Eso significa que ya no somos "novias"!? (dijo Luján en tono burlón)

-¡Ven acá mensa! (exclamó Vico abrazando a Luján, que no pudo evitar una lagrimita)

-¡ESTOY MUY FÉLIZ POR TÍ JAMES! ¡Te mereces todo lo mejor del mundo!... (exclamó Mabel contenta abrazando a su sobrino)... ¡Supongo que ahora tengo una sobrina nueva! (agregó viendo sonriente a Vico)

-¡Pues, eso espero señora Mabel! (dijo Vico féliz pero algo avergonzada)

-¿¡Como que señora!?...¡Mabel a secas, que para eso ahora soy tú tía política! (exclamó Mabel mientras la abrazaba y besaba)

-¡Que lástima que Celina no pudo venir con nosotras por los malestares de su embarazo y se perdió todo esto! (exclamó Mía)

-¡Cuidado sí mís hermanitas Roberta y tú terminan igual por estar jugando con las "culebras" de ciertos niños! (dijo en voz baja al oído de Mía y Roberta la burlona traviesa de Luján)... ¡Ay!... (exclamó cuando Roberta y Mía la pellizcaron al mismo tiempo)

-¡No se preocupen en callarla...parezco mensa pero no lo soy! ¡Y no crean que estoy muy contenta con el jueguito de las "culebras"! ¡Imaginense sí Alma se entera de que dejé a sus dos hijas que hicieran eso bajo mís narices! ¡QUE JUVENTUD! (exclamó Mabel)

-¡Perdone niña Mabel, pero usted tampoco era muy santa a esa edad! Creo que ya tenía al niño Diego en la panza! (dijo Yagüe)

-¡YAGÜE! (exclamó Mabel)

Entre Heroes y HadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora