Entre Heroes y Hadas

Parte 84

-Hay otra cosa interesante...esa persona que protege los secretos del difunto Bustamante...alguien que él estaba seguro que nunca lo traicionaría...alguien por quien pondría sus manos en el fuego, a juzgar por la vehemencia de sus palabras...alguien que tampoco se dejaría asustar por los mortales enemigos de Bustamante... (decía Cisneros pensativo)

-¿En quién piensa señor?...¿No será...?

-Sí Santiago, creo que pensamos en la misma persona...la única posible...y el único que habló con Bustamante en persona después de ésta conversación y que reunía las condiciones para ser esa persona de confianza...Diego Bustamante...

En otro lugar de la ciudad otras personas llegarían a la misma conclusión, pero por otras vías bastante diferentes...

Un hombre ensangrentado estaba de rodillas sobre un suelo de tierra...su rostro mostraban las terribles señales de heridas y golpes, y sus gestos eran de dolor y miedo...

-¡Vaya, vaya Sarmiento!...¿¡Creíste que nunca me iba a enterar que nos estabas robando en el banco!?...Hace tiempo que te teníamos pillado cabr*n...Mira que robarle a unos narcos, hay que tener huev... (decía El Chacal Escalante)

-¡Perdoneme! (decía el hombre llorando y suplicando por su vida)

-¡Que te perdone Dios, yo no soy ni cura para perdonarte!... (decía El Chacal entre fuertes risotadas)... ¡Pero lo peor es lo que hiciste después!...¡Cuando te diste cuenta de que estabamos por descubrirte, fuíste corriendo a pedirle ayuda mí peor enemigo!...¡A LEÓN BUSTAMANTE! (dijo furioso dandole una patada en la cara al hombre que lo derribó de bruces)...

El hombre se quejaba del dolor...

-¡Hagan que se arrodille de nuevo muchachos!... (dijo El Chacal)... ¡Mira que eres menso, creyendo que él te podía proteger cuando no pudo protegerse a sí mismo!...Y lo más triste es que te metiste en todo esto por una vieja...para tener contenta a la amante esa que tenías...una chava preciosa por cierto...¡Ay que ser bru*to para creer que esa hembra te podía querer!...¿No te has visto en un espejo guey?...¡Esa chava estaba contigo por lana y nada más!...Y por ella le ponías los cuernos a tú mujer...¡la madre de tús hijos!...y por ella me robaste y luego quisiste venderme a Bustamante...Pero no te preocupes, los muchachos y yo ya visitamos a tú chava para darle recuerdos de tú parte...luego la gozamos bien gozada, ja ja ja...y después la mandamos al "otro barrio" para que te espere allá cuando llegues...

El Chacal y sus hombres se reían a carcajadas mientras el hombre lloraba histérico...

-Pero gracias por la información que nos diste, ha sido de utilidad saber que cosas le entregaste a Bustamante y sobre todo el cuento ese de la persona a quien el finado León dejo encargado de la información...Nada más por eso te voy a ahorrar más horas de sufrimiento...¡Adios Sarmiento!

-¡NOOOOO!

El grito del hombre fue apagado por la bala que le destrozo la cabeza y le dio muerte...la bala que había salido de la pistola de El Chacal...

-¡Eso le pasa a los traidores!...¡Por tú culpa tengo un nuevo dolor de cabeza!...Ahora tengo que saber sí es verdad eso de que León le dejo a alguien la maldita información que éste cerd+o le entregó, o sí era puro cuento para animar al cobarde de Sarmiento...¿Acaso será tú cachorro León?...Será Dieguito el causante de mí dolor de cabeza...porque sí es así habrá que buscar una buena aspirina... (dijo el criminal con expresión sombría y amenazante)

A Diego le obsesionaba una idea, una necesidad terrible que iba creciendo en su interior...Todos los acontecimientos de las últimas horas lo estaban empujando hacia un curso de acción inexorable del que no podía escapar...