Parte 80

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Viñeta:

¿Existe el hombre o la mujer de nuestra vida?...En otras palabras, ¿Existe nuestra "alma gemela"?...

Algunos estudiosos afirmaron recientemente que de acuerdo a sus investigaciones, el amor romántico no puede durar más de cinco años...Que por lo tanto, todo no es más que una fantasía creada por nuestras hormonas; casi un simple desorden orgánico temporal...Por supuesto los cínicos que no creen en el amor celebran ésta teoría, mientras los romanticos la rechazan...

¿Cuál será la verdad?...Sí bien es cierto que mucha gente no llega a conocer un amor verdadero en su vida, y que la mayoría de las personas no permanecen al lado de un "alma gemela" toda su vida sino que tienen varias parejas temporales (sólo hay que ver cuanta gente se divorcia y cuantos cambian de pareja cada cierto tiempo); también es cierto que todos sabemos de esos raros casos de personas que después de encontrar al "amor de su vida"permanecen a su lado por el resto de su vida (incluso por 30, 40, 50 o más años).

Y sí nos fijamos bien, muchas de esas personas que han tenido muchas parejas en su vida; cuando voltean la vista para hacer un resumen de su existencia, se dan cuenta de que una de esas parejas fue mucho más importante que todas las demás...Y aunque las circunstancias o el destino los haya separado, esa persona dejó una huella más profunda que todas las demás...

¿Será posible entonces que todo sea algo más que una fantasía estúp*da de romanticos ingenuos?...Pero sí existiera esa persona especial, ¿Como reconocerla?...Sobre todo sí hemos tenido muchos desengaños en nuestro pasado (aunque éste pasado haya sido incluso breve) y sentimos miedo de entregar nuestro corazón para verlo roto de nuevo...¿Como superar el miedo y la decepción para hallar al "amor de nuestra vida"?...

¡Y es que el amor romántico es como Dios...es un asunto de , siempre al filo de la navaja entre el creer y el no creer!...

Vico caminaba por el pasillo de la clínica; había ido un momento a búscar un café en la máquina expendedora tragamonedas. No tenía ganas de bajar sola al cafetín de la clínica sólo para tomarse un café, y tampoco quería alejarse mucho.

Desde que aquella pesadilla había comenzado Vico sufría de una fuerte carga de estres; de verdad se sentía muy mal por lo que le pasaba a Diego y a Roberta. Ella nunca se hubíera imaginado que en el Elite Way School llegaría a encontrar una verdadera familia; y menos aún hubiera podido imaginar que ella misma cambiaría tanto su forma de ser. La antigüa Vico caprichosa, egoísta y malcriada ya casi era una cosa del pasado; la nueva era más madura, generosa y noble, aunque lamentablemente eso no servía de nada con los hombres...

Como siempre Vico estaba hermosa ese día, vistiendo una minifalda más o menos corta, una blusa ajustada y escotada, y una sandalias de tacón alto; se veía sexy pero al mismo tiempo tenía la imagen de una adolescente, quizás aparentaba menos de su verdadera edad (a lo cuál ayudaba su angelical rostro de niña).

La chica introdujo las monedas en la máquina y solicito el café de su preferencia; lo tomó y se disponía a irse. Pero cuando fue a darse la vuelta alguien la tropezó...

-¡Oígame! (exclamó Vico algo enfadada)

-¡Disculpeme...perdone usted señorita!

-¡Demonios, acababa de...! (Vico iba a decir que acababa de sacar la ropa de la tintorería, pero cuando vio a la persona que la había tropezado y le había pedido disculpas, se quedo callada)

Frente a ella estaba un hombre jóven de entre 25 y 30 años de edad; era algo más alto que ella, con una altura de 1,74 aproximadamente. Él hombre no era musculoso pero tampoco debilucho, ni era gordo pero tampoco flaco; tenía una contextura normal aunque un poco fornida. Era de piel blanca, pero lucía un hermoso bronceado; su rostro era varonil y atractivo, y tenía unos ojos verdes muy hermosos. Su cabello castaño y liso combinaba a la perfección con su cara; él chico vestía de manera informal pero elegante, con una chaqueta y unos jeans. Era un hombre apuesto pero sin llegar a ser una cosa del otro mundo; sin embargo, tenía "algo" que causaba una gran impresión en Vico...

Entre Heroes y HadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora