Entre Heroes y Hadas

Parte 116

Muy bien Carlos y Helena, espero que sepan lo difícil que ha sido para el Director Cisneros conseguir que los americanos los dejen portar armas en Los Ángeles...a cambio debemos colaborar con el FBI y compartir toda la información...¡Y sobre todo actuar con prudencia!

El que hablaba era Manuel Hidalgo Sánchez, Oficial de Enlace de la AFI en el Consulado de México en Los Ángeles...

-¡Sí señor! (dijo Helena)

-¡Y quiero recibos de todos sus gastos para justificar los viaticos!

-¡Sí jefe! (dijo Carlos)

-¡Ahora volvemos al hotel a vigilarlo señor! (dijo Helena)

Pocas horas después en el hotel, Diego esperaba impaciente a que el infiltrado en el cartel de El Chacal lo llamará respondiendo a su E-mail. Ya estaba a punto de bajar de la habitación cuando sonó el celular...

-¡Alo, diga!

-¿Diego Bustamante?

-¡Sí, soy yo...!

-¿Como título el E-mail que me mandó?

-"Mensaje para un amigo de papá"

-¿Todo lo que me dijo en el mensaje se lo dijo su padre?

-¡Así es...! ¿Pero quien...?

-¡Escuchame muchacho! ¡No tengo tiempo de presentarme! ¡Sal del hotel ahora mismo!

-¿¡Como sabe que estoy en un hotel...!?

-¡Porque El Chacal ya lo sabe!...¡Mientras hablamos los hombres de un narco de Los Ángeles que trabaja para él están por llegar al hotel! ¡Agarra a tús amigos y largate!

-¿¡Pero como demonios...!?

-¡Sí no me crees estás muerto! ¡TE DIGO LA VERDAD!...¡NO SEAS MENSO!

Diego se acercó a la ventana y no vio nada; pero de pronto vio que una camioneta seguida por otro coche frenaba de golpe y se bajaban unos tipos con pinta de matones y corrían hacia el hotel...

-¡ESTÁN AQUÍ!

-¡CORRE BUSTAMANTE, CORRE SÍ QUIERES VIVIR!...

La llamada se cortó y Diego salió corriendo de la habitación...

Diego fue a la habitación de al lado donde en ese momento se encontraba Miguel conversando con Santos...

-¡MATONES DE EL CHACAL...ESTÁN AQUÍ, AHORA!... (exclamó Diego alterado)

-¿¡DONDE!? (preguntó nervioso Miguel)

-¡ABAJO...NO HAY MUCHO TIEMPO!

-¡SANTOS, VE POR TÉO! (exclamó Miguel)

Los tres salieron al pasillo, pero mientras Santos iba hacia un lado a buscar a Téo, Diego y Miguel iban en la dirección contraria...

Diego volvió a su habitación seguido por Miguel...Una vez allí, Diego agarró dos mochilas...

-¿¡ALLÍ TIENES LO QUE SACASTE DEL BANCO!? (preguntó Miguel agitado)

-¡SÍ!

-¡DAME UNA!

Diego le pasó una mochila a Miguel que se la colgó de inmediato; Diego se colgó la otra. Los dos salieron al pasillo, donde Santos y Téo venían a su encuentro a la carrera...

-¿¡DONDE ESTÁN GIOVANNI Y TÓMAS!? (preguntó Diego sumamente nervioso)

-¡BAJARON HACE UN RATO...DIJERON QUE NO TARDARÍAN MUCHO! (contestó Téo presa del miedo)